-Anuncia el presidente López Obrador la construcción
del camino Santa Mónica – Pahuatlán
El presidente Andrés Manuel López Obrador y el gobernador Omar Fayad encabezaron el Diálogo con los pueblos indígenas otomí y tepehua en el municipio de Tenango de Doria, a fin de construir de manera conjunta las políticas y acciones para el desarrollo y bienestar integral de sus comunidades.
Tras la celebración de la ceremonia a la madre tierra, las autoridades coincidieron en la importancia de conocer las realidades y aspiraciones de vida de los pueblos indígenas del país, así como las soluciones y alternativas a sus necesidades.
“Para dar resultados que la gente espera debemos trabajar en ellos, enfrentando diferencias, trabajando del brazo, gobiernos federal, municipal y estatal, porque sólo así, vamos a dar resultados aquí en Hidalgo y en todo México”, afirmó el mandatario hidalguense.
Desde Tenango de Doria, hoy punto de referencia en México y el mundo, gracias al talento de los artesanos de esta región el gobernador Omar Fayad afirmó que en la entidad se ha decidido hacer un esfuerzo sin precedentes para apoyar y mejorar la calidad de vida de las familias indígenas.
En tres años, el gobierno del estado ha invertido en acciones para mejorar la calidad y espacios para la vivienda; drenaje, infraestructura eléctrica, alcantarillado y saneamiento, becas, uniformes y útiles escolares, entre otros beneficios.
El presidente Andrés Manuel López Obrador insistió en la importancia de fomentar el efecto multiplicador de bienestar en torno a cada una de las comunidades indígenas del país; reconoció que el gobernador Omar Fayad está trabajando coordinadamente con la federación, pues insistió “tenemos que unirnos por la transformación de Hidalgo, con respeto y democracia”.
Ante una plaza principal llena, el jefe del Ejecutivo nacional se comprometió a implementar programas federales para esta zona como el de Sembrando Vida, la construcción de una sede del Banco del Bienestar, a mejorar los servicios de salud y sobre todo a iniciar la construcción del camino Santa Mónica – Pahuatlán.
El director general del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, Adelfo Regino Montes, señaló que la transformación de las políticas es necesaria, por ello habrá un respaldo en temas como el cuidado de los recursos naturales, pero también en la protección de la propiedad intelectual de los bienes materiales e inmateriales que se derivan de los pueblos originarios, por lo que afirmó habrá de prevalecer siempre el uso del diálogo entre los tres órdenes de gobierno para alcanzar las metas trazadas.
Erick Pedraza Mondoño, representante del pueblo Otomí, en nombre de los pueblos indígenas asistentes al encuentro, señaló que tras la asamblea con las autoridades indígenas municipales, tradicionales, agrarias o correspondientes, con la finalidad de consensar acuerdos y propuestas, que se llevó en días anteriores, es necesario que prevalezcan los derechos de los pueblos originarios a través de acciones contundentes como mejora a la infraestructura carretera, servicios de salud, cadenas de valor en la producción del campo, manejo adecuado de las aguas residuales, rellenos sanitarios, recuperación de los bosques, entre otras iniciativas entregadas al presidente.
En Hidalgo un millón de personas son indígenas de acuerdo al INEGI (2015), lo que equivale al 36% de la población en el estado; en tanto que aproximadamente 385 mil hablan una lengua indígena.
La región Otomí – Tepehua está conformada por los municipios de Acaxochitlán, Agua Blanca, Metepec, Huehuetla, San Bartolo Tutotepec y Tenango de Doria, ahí habitan poco más de 128 mil 432 personas distribuidas en 405 localidades, de las cuales 113 son indígenas.
Hidalgo cuenta con 38 municipios indígenas y es la sexta entidad con mayor porcentaje de hablantes de lengua indígena.
Los tres municipios con mayor porcentaje de población indígena a nivel estatal son Jaltocán, Xochiatipan y Yahualica respectivamente.
Aproximadamente 43 mil 991 personas en Hidalgo sólo hablan náhuatl, otomí, tepehua o mixteco, su lengua materna, y no hablan español; dicha población está distribuida en las regiones Otomí-Tepehua, Valle del Mezquital y la Huasteca.