De acuerdo con un estudio realizado recientemente por la revista de medicina Public Health Nutrition, se descubrió que Coca-Cola pago a una red mundial de científicos para que negaran el impacto que provoca el azúcar que contienen sus bebidas en la salud de los consumidores.
Además, la revista mencionó que la empresa impulsó la creación de la red global de Balance Energético, para que de esta forma consiguiera que cientos de científicos avalaran que la obesidad se debe a la falta de ejercicio y no a la cantidad de azúcar del refresco.
La Red global aseguró que la empresa refresquera solo donaba para investigaciones y que se ocultaba el dinero que se inyectaba, sin embargo, investigadores de la universidad de Oxford sacaron a la luz la verdad.
En la investigación analizaron a mas de 18 mil paginas entre Coca-Cola y dos universidades de la Red, en donde su fachada era la de una organización sin fines de lucro que se dedicaba a estudiar la obesidad, sin embargo la realidad era que trabajaban para decir que el refresco no causaba algún daño.
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