
Lo que inició como una denuncia ciudadana en redes sociales para evitar que más gente fuera al lugar, terminó con una visita inesperada de las autoridades, y es que les cayó la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) a los que vendieron las enchiladas a 810 pesos en Pátzcuaro, Michoacán.
A través de las redes surgieron imágenes y videos en los que se puede ver al personal de la Profeco abordar a las trabajadoras del negocio a quienes les llamaron la atención por no poner los precios a la vista de sus productos. Incluso el coordinador del equipo les pidió que mostraran las tarifas a lo que una de las mujeres le dijo que estaban en la carta, la cual no se sabe si se encontraban ahí desde antes del incidente o las colocaron después.
En las grabaciones también se les advierte que les sancionarán si no se apegan a los reglamentos e incluso se aprecia que el resto de trabajadores comenzaron a llenar diversas hojas con el nombre del platillo y su costo para sobreponerlas en el puesto de comida.
El presidente municipal de Pátzcuaro, Julio Arreola, abundó que se dio atención a la denuncia ciudadana, además que se inspeccionó la calidad de alimentos que se ofertan en el lugar. Aunado a ello, comentó que acordaron con la Profeco que inspeccionarán la zona cada cierto tiempo para confirmar que cumplieron con lo establecido durante la intervención.
Con información de Plumas Atómicas