
Luego de haber superado el COVID-19, en enero pasado, Miguel Luna Calvo junto a su familia, hicieron un viaje al parque Xenses, sin embargo, la diversión termino en tragedia, luego que el niño Leo fuera succionado por un filtro de agua en la atracción “Riolajante”.
Tras el accidente el niño fue trasladado a un nosocomioAmerimed de Playa del Carmen, donde perdió la vida, trayendo con ello el impedimento a Luna Calvo de trasladar el cuerpo del infante a la Ciudad de México.
“Presentí que no querían que lo sacara de Quintana Roo, yo creo que por el control”, dijo el señor a Manuel Feregrino en entrevista para el programa “Por la mañana” de Radio Fórmula.
“Me fui al hospital y todavía estaba el cuerpo de mi hijo y yo me molesté muchísimo. Pregunté por qué no habían llamado al Ministerio Público o la Fiscalía, porque fue un delito. Como que querían que yo pidiera a los médicos que cambiaran en diagnóstico del acta de defunción”, agregó
Tras confirmarse el deceso del niño, el parque comunicó a Miguel Luna que “el certificado de defunción había salido con el diagnóstico de ahogamiento”, además le comentaron que con el dictamen no era posible llevarse a su hijo a Durango, por lo que pidieron a los médicos de cambiarlo
Como consecuencia de dicha situación, de cierta manera obligó a la Fiscalía de Quintana Roo a llamar a los peritos, para que hicieran el levantamiento del cuerpo de Leo, por lo que se llevaron el cuerpo del menor al menor al Semefo, a pesar que, Miguel Luna les pidió que se lo entregaran para llevárselo a casa y velarlo como correspondía.
Por tal motivo, y para evitar que su hijo se quedará en el Semefo, acudió a la Fiscalía, donde le aseguraron que, si no otorgaba el perdón al parque, no se podía llevar el cuerpo del menor, y también le impidieron hacer la relatoría de los hechos.
“Tienen que otorgar el perdón, sino no se lleva a su hijo […] Ya no haga nada y aquí se va a quedar su hijo 15 días más, porque tenemos cinco muertos más”, le dijo la vicefiscal.
A la abogada me le hinqué, le lloré y le dije, ‘yo prometí que mi iba a llevar a mi hijito y para qué quieren hacerle una autopsia, si ya sabemos de qué falleció. Yo creo que le toqué el corazón. Me dijo, ‘debe firmar el perdón al parque’. Yo le respondí, ‘hago lo que quieran, pero entréguenme a mi hijito”, narró.
Luego de seis horas, Miguel Luna se pudo llevar el cuerpo de Leo. “Salí a la una de la mañana hasta que me entregaron a mi hijito”, finalizó.
Fuente: Radio Formula