
A la 1:24 am mientras muchas personas dormían el terremoto más mortífero que ha golpeado a Afganistán en décadas acabó con la vida de más de mil víctimas, y la cifra sigue en aumento, junto a centenares de personas lesionadas.
El sismo se registró a una profundidad de 10 kilómetros de acuerdo con el USGS. “El momento del terremoto, en la oscuridad de la noche… y la poca profundidad de 10 km de su epicentro provocaron un mayor número de víctimas”, explicó Najibullah Sadid, un experto en gestión de recursos hídricos afgano.
El especialista agregó que el sismo también coincidió con las fuertes lluvias en la región que provocaron que la casas, hechas de barro y otros materiales naturales, fueran más vulnerables al sismo.
Las imágenes después del terremoto muestran cómo algunas aldeas “han sido completamente destruidas”, como confirmó Maulawi Sharafuddin Muslim, viceministro interino de la autoridad de gestión de desastres del país.
La mayoría de las muertes se produjeron en la provincia de Paktika, en los distritos de Giyan, Nika, Barmal y Zirok, de acuerdo con las autoridades, mientras que en la provincia de Khost, 25 personas murieron y varias más resultaron heridas, y cinco personas murieron en la provincia de Nangarhar, dijo la autoridad de gestión de desastres. Las autoridades temen que conforme avancen las misiones de búsqueda y esfuerzo aumente el número de víctimas.
Con información de Plumas Atómicas