· En Pachuca y Jacala, a través de operativos de supervisión y vigilancia
Resultado de los operativos de supervisión y vigilancia que se llevan a cabo permanentemente en los distintos municipios del estado, es que a través del Sistema de Transporte Convencional de Hidalgo (STCH), se detectaron cinco unidades piratas: dos en Pachuca de Soto y tres Urvan de Chapulhuacán, ubicadas en Jacala de Ledezma.
La secretaria de Movilidad y Transporte (Semot), Lyzbeth Robles Gutiérrez, ha solicitado al personal de dicha dependencia, permanecer atentos a este tipo de casos y proceder legalmente, con la finalidad de cuidar la integridad de las personas usuarias del transporte público.
Así, en seguimiento a las instrucciones del gobernador Julio Menchaca Salazar, de generar acciones encaminadas a una movilidad segura y evitar actos de corrupción, es que se detuvieron a las unidades.
Cabe especificar que, de las dos unidades de Pachuca, una correspondía a transporte individual (taxi); después de una revisión de documentación correspondiente, se verificó que las placas eran falsas, fueron retiradas, se procedió al resguardo de la unidad y avisó a la autoridad competente.
La segunda detectada en la capital hidalguense, fue una unidad particular marca KIA, modelo RIO con placas del estado de Nuevo León, que proporcionaba servicio no autorizado de Pachuca a Huejutla y ponía en riesgo a las personas usuarias; esto último, por no encontrarse regulada, ni alinearse al marco normativo establecido para fungir como unidad de transporte público convencional.
En el caso de Jacala de Ledezma, se realizó un operativo donde se sancionó a tres unidades tipo Urvan color blanco, que prestaban también servicio de transporte público sin contar con la concesión correspondiente.
Una de ellas con ruta a Xochiatipan y dos más, de Chapulhuacán a Pachuca, que realizaban descensos de pasaje en los municipios de Ixmiquilpan y Actopan.
Es importante destacar que la Semot seguirá con el impulso de trabajo y acciones que abonen en una movilidad digna para la población, y hace un exhorto a las personas concesionarias y operadoras del transporte público a conducirse bajo la legalidad.
Asimismo, invita a las y los usuarios a evitar este tipo de transporte con la finalidad de salvaguardar su integridad.