
- La mujer a su cuidado y su pareja habían sido detenidos
Luego que hace unos días en la alcaldía Iztapalapa una mujer de la tercera edad escribiera una carta en la que denunciabamaltrato por parte de su propia hija y yerna, y que se le entregará a un enfermero mientras era vacunada contra el COVID-19, por lo que fue resguardada la abuelita en la unidad de vacunación.
“Ayúdenme por favor, que estoy secuestrada por mi hija y su esposo. Tengo un año aquí encerrada y no me dejan salir ni en la puerta de la casa (…) Les pido que me saquen de aquí por favor.
“Tengo un año aquí encerrada y no me dejan salir ni a la puerta de la casa ¿m dejan? Les pido que me saquen de aquí por favor. Mi nombre es Carolampia Díaz y de ellos son Laura y Ramón Sánchez Gomez Gamez Díaz (sic)”, decía el escrito.
Al recibir el aviso la Secretaría de Seguridad Ciudadanaatendió de inmediato el caso por posible maltrato familiar, y detuvo a los acusados además fueron presentados en el Ministerio Publico.
Por su parte, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México dio a conocer que, la adulta mayor decidió no continuar con la denuncia, sólo pidió no regresar con su hija Laura y quedar al cuidado de otra de sus hijas.
En ese sentido, la declaración de la fémina refirió que, al sufrir una caída en su domicilio ubicado en Naucalpan, Estado de México, a principios de año, una de sus hijas se la llevo a su casa en la colonia Lomas de la Estancia, de laalcaldía Iztapalapa. Además, confirmó que su hija la trataba bien, la atendía y le daba sus medicamentos, sin embargo, no la dejaba salir a la calle.
Así mismo, el M.P. pidió a la Policía de Investigación investigar la vida de los familiares y recibir las grabaciones de las cámaras de videovigilancia que se encuentren en las inmediaciones del domicilio de la hija. Sin embargo, para sorpresa la señora no permitió que se realizaran lasinvestigaciones, y pidió no continuar con la denuncia. Sólo manifestó su deseo de no regresar a Iztapalapa.
Finalmente, la Fiscalía informó que tanto el médico legista y un perito en psicología no encontraron lesiones corporales ni maltrato en la mujer de 85 años, por lo que dejaron en libertad a los familiares, sin embargo, continuarán las investigaciones.
Con información de Grupo Fórmula y UnoTV
Fuente: Radio Formula