
En Metepec, Estado de México, el señor Pascual con 100 años de edad, trabaja como artesano haciendo jarros para pulque, un oficio que es heredado de familia, mismo que, ahora practica su hijo y nieto, con la esperanza de continuar el legado.
Día con día don Pascual hace bellos jarros pulqueros de forma completamente artesanal, los esculpe a mano y les da un tratamiento térmico finalizándolos con un trabajo de pintura a mano para venderlos, cuenta que es un trabajo que le enseño su padre, pero en un inicio el solo hacia ollas, por lo que el señor Pascual decidió cambiar de producto.
Dylan, el nieto de don Pascual cuenta que está orgulloso y admirado por el trabajo de su abuelito, pues él hace completamente a mano los jarros que por su proceso de elaboración y pintura podrían ser obras de arte, y como cereza del pastel el hombre les pone un nombre a todas y cada una de sus obras, sin repetirlos ya que cada uno es especial.
Con información de TV Azteca Noticias | Redacción por Juan Pablo Pelcastre – Dinámico Informativo