
Ciudad de México.— La tragedia ocurrida en el Puente de la Concordia, en Iztapalapa, tras la explosión de una pipa de gas, dejó escenas de dolor, desesperación y pérdidas humanas. Sin embargo, también emergieron historias de valentía y solidaridad. Una de ellas es la del policía segundo Sergio Ángel Soriano Buendía, de la Policía Bancaria e Industrial (PBI), quien arriesgó su vida para salvar a una niña de apenas dos años.
De acuerdo con los reportes, el uniformado fue uno de los primeros en llegar a la zona del siniestro, en Santa Marta Acatitla, cerca de la calzada Ignacio Zaragoza. En entrevista recordó que el calor era insoportable, pero no dudó en correr hacia las llamas.
“Voy corriendo con mis compañeros tratando de rescatar a los que pudimos rescatar. Como pude, porque la ropa de la niña seguía quemándose, la separo, la abrazo, trato de cortar la ropa que se estaba incendiando y posteriormente la llevé a un hospital”, relató Soriano.
La menor, identificada como Sule, fue protegida inicialmente por su abuelita, Alicia Matías, de 49 años, quien la cubrió con su propio cuerpo en un intento por salvarla. Ambas fueron trasladadas de emergencia a hospitales especializados en atención de quemaduras. La imagen de la niña en brazos del policía se viralizó rápidamente en redes sociales, donde fue reconocida como símbolo de humanidad en medio de la tragedia.
Antecedente de honestidad en 2015
No es la primera vez que el nombre de Sergio Soriano aparece en los titulares. En diciembre de 2015, este mismo agente se volvió viral tras encontrar en el estacionamiento de una tienda departamental en Polanco una bolsa con 42 mil 572 pesos en efectivo, además de credenciales y pertenencias personales.
El dinero equivalía a casi un año de su sueldo, pero el policía decidió devolverlo íntegro a sus dueños. “Mi madre me inculcó principios. Nunca he tomado lo que no es mío y nunca lo haré”, declaró entonces. Su acción le valió un ascenso, aumento salarial y mejores prestaciones dentro de la corporación.
Una carrera marcada por la honestidad y el servicio
A casi diez años de aquel gesto de integridad, Soriano vuelve a ser reconocido, esta vez no por rechazar dinero ajeno, sino por salvar una vida en una de las tragedias más impactantes de los últimos días en la capital del país.
Su trayectoria, marcada por la honestidad y el compromiso con la ciudadanía, refuerza la importancia de los principios en la labor policial.
Con información de La Jornada