
• La madre del hoy occiso arribó al lugar y manifestó que el “solo usaba el arma para asustar a la gente, pero nunca le disparó a nadie”.
Por redacción
Si pudiéramos buscar el origen del porqué las personas asaltan con violencia a otras, podríamos decir que generalmente el delincuente no tuvo una formación correcta, es decir el fallo estuvo en la educación en algún proceso de su vida, ya sea porque conoció personas incorrectas, o simplemente porque le gustó el dinero sin trabajar. Y esto no solo ocurre en México, no creamos que somos exclusivos de la violencia.
Es el caso de Amatitlán, Guatemala, donde precisamente un ladrón perdió la vida al querer despojar de sus pertenencias a usuarios del transporte público masivo, pues uno de los pasajeros traía un arma de fuego y lo abatió.
La voz se corrió rápido y fue entonces que la madre del hoy occiso se apareció por el lugar y manifestó que su hijo solo “asustaba y nunca había matado a nadie”.
Asimismo se conoció que otro ladrón más se dio a la fuga después del atraco, pero minutos más tarde la policía local lo aseguró.
“Me lo mataron; él solo salió a asaltar en los buses como todos los días”, se lamentaba la mamá del fallecido.
La señora exigió a las autoridades correspondientes en este caso a quienes hacen posible la procuración de justicia que este caso no quedará impune pues su hijo “solo usaba el arma para asustar a la gente, pero nunca le disparó a nadie”.
Aquí es donde nos podemos dar cuenta que a veces madres y padres de familia no logran vislumbrar los problemas de los vástagos pues en ocasiones se vive en una realidad alterna donde no se puede ser objetivo con ellos para poderles modificarles conductas.