
Con base en información preliminar se sabe que en la última década este ciclón ha sido el más fuerte en llegar a India y Bangladesh, dejando al menos 82 muertes registradas hasta el momento.
Antes de la llegada del ciclón autoridades del lugar hicieron un llamado para prevenir daños y evacuar con tiempo a la población, afortunadamente eso salvo muchas vidas, aunque hubieron decesos está previa atención fue de gran ayuda.
“Nunca había visto antes un ciclón así. Parecía el fin del mundo. Lo único que podía hacer es rezar (…) para que el todopoderoso Alá nos salvara”, dijo Azgar Ali, un residente del distrito de Satkhira en Bangladesh.
El terrible ciclón provocó que las olas alcanzaran hasta los 5 metros de altura, y ráfagas de viento de hasta 185 km por hora.
Imágenes de Reuters TV grabadas en Bengala Occidental mostraron botes volcados, personas caminando con el agua hasta las rodillas y buses estrellados unos con otros.