
Después de que Jesús Guillermo “N” confesara que participó en un asalto en la Ciudad de México, el cual dejó como saldo a una persona muerta, sus padres adoptivos lo entregaron a las autoridades correspondientes.
El joven de 15 años junto con su amigo Adrian “N” a bordo de una motocicleta se detuvieron frente al café “El Ilusionista” de la Colonia Escandón y amenazó a los comensales.
Entre los clientes del restaurante se encontraba un ex empleado del Sindicato Mexicano de Electricistas que empezó a forcejear con los asaltantes hasta que Adrian, le disparó con un arma de fuego y perdió la vida.
De este modo, cuando Jesús Guillermo les confesó su participación en el crimen a sus padres adoptivos, Erick y Leslie Ivonne, decidieron entregarlo a las autoridades para que se iniciara un proceso en su contra. De esta forma, los tutores del menor actuaron conforme la ley, en favor de la seguridad en la CDMX, la cual actualmente es sede de distintos conflictos entre grupos criminales.
Fuente: Plumas Atómicas