
El estudio realizado por Erin Lashnits, delDepartamento de Ciencias Médicas, encontró evidencia de infección por Bartonella en la sangre de las personas con trastorno esquizoafectivo.
«Los investigadores han estado analizando la conexión entre la infección bacteriana y la enfermedad neuropsiquiátrica durante algún tiempo», dijo la especialista que comenzó el estudio en la Universidad Estatal de Carolina del Norte.
De acuerdo con la autora, los trabajos sugieren que la posesión de un gato está asociada con la esquizofrenia debido al parásito zoonótico Toxoplasma gondii, aunque no se ha contado con evidencia de ello; sin embargo, optaron por buscar otro agente infeccioso como la Bartonella.
Los gatos pueden infectarse de esta bacteria ante la exposición de pulgas y garrapatas, que son vectores naturales de la bacteria, así que los felinos pueden ser anfitriones de hasta 40 especies de Bartonella, hasta no hace mucho estaba relacionada con una infección de corta duración.
Para la investigación de Carolina del Norte se contó con la participación de 17 pacientes con esquizofrenia, de los cuales 12 tenían ADN de Bartonella en la sangre, en comparación con sólo uno de los 13 del grupo de control.
Destacaron que el estudio no pudo demostrar por diseño un vínculo causal entre la infección por Bartonella y la esquizofrenia.
Fuente: Azteca Noticias